El ciudadano José Ortega Cano se halla actualmente en prisión porque hace tres años se sentó al volante de su Mercedes Benz todo terreno completamente borracho, invadió el carril contrario de la carretera a 125 kms por hora y colisionó de frente con el automóvil conducido correctamente por otro ciudadano, Carlos Parra, al que le causó la muerte. Parra, camarero, se dirigía a su trabajo, a 50 kilómetros por hora.
El ciudadano José Ortega Cano fue detenido y enjuiciado. Ante el juez negó enfáticamente que hubiese bebido. Las pericias de la policía fueron contundentes (su sangre contenía en el momento de la colisión casi el triple de alcohol de lo tolerado) y fue condenado a dos años y medio de cárcel.
La celda que lo aloja seguramente no es igual a las que ocupan otros delincuentes de poca monta. La Justicia, ¿es igual para todos?
Algunos obsecuentes periodistas y presentadores de televisión lo mencionan como "el diestro" o "el maestro".
Otros, al pensar que la víctima de su irresponsable borrachera pudo haber sido un familiar o un amigo... o cualquier persona honrada y decente como lo era el ciudadano Carlos Parra, preferimos identificarlo como "el homicida", para que todo se encuadre en el marco legal.
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