22 de marzo de 2012

R.I.P.



Allí están. Los 32 volúmenes de más de 1.000 páginas cada uno, junto con siete u ocho tomos más de actualización anual, descansan en las estanterías de mi biblioteca, con sus tapas de cuerina y lomos impresos en letras doradas.

Todo (ó digamos casi todo) el conocimiento de la humanidad está en esas páginas de fino papel prolijamente impresas, reemplazadas ahora por su versión digital que marca su defunción tras una larga y provechosa vida de 244 años.

¿Habrá sido una inversión poco rentable? Compré la Encyclopaedia Britannica hace muchos años, y en inglés para fomentar así el aprendizaje del idioma, tanto mío como de mis hijos, para quienes los 40 tomos quedan en herencia. ¿Por qué poco rentable? Porque debo haber consultado el 0,02% de su contenido. Y ahora, con la versión digital al alcance de un click del ratón travieso, ¿quién va a tener espacio en su biblioteca para darle alojamiento?

Triste destino el de la Britannica, pero no estoy arrepentido en absoluto. Ahora me encuentro a 12.000 kilómetros de distancia de esos volúmenes, pero mientras los tenía cerca me sentía seguro; sabía que me iba a disipar cualquier duda, y así ocurrió muchas veces.

Si Jorge Luis Borges viviera, quizás repitiera lo que dijo alguna vez: “A una isla desierta me llevaría la Enciclopedia Británica”. ¿Pensaría ahora lo mismo… o preferiría una tableta con acceso a Internet?.

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2 comentarios:

flaco dijo...

A JOSÉ:
Por ser anglófilo compraste solamente 32 volúmenes. Pensá los que compraron la Enciclopedia ESPASA CALPE que cuenta con 113 volúmenes -116 tomos- (excluyendo el Index 1934-1980 por redundante), y según cálculos realizados por sus editores, más de 175.000 páginas, 200 millones de palabras, 197.000 ilustraciones en negro, 4.500 láminas en color, 5.000.000 citas bibliográficas y 100.000 biografías.Y hay más.AMÉN.

jose trepat dijo...

En algún momento tuve el delirio de la Espasa, pero prevaleció mi lado anglófilo. Es que...... es que.... a los ingleses no hay con qué darle flaco.... Si no fuera por ellos no tendrías Fútbol para todos...