6 de diciembre de 2010

No me canso de repetirlo


En días recientes llegó a mi buzón de correo electrónico el enlace para ver y, sobre todo escuchar, una sesión de arias de ópera en un centro comercial de Buenos Aires.

En momentos en que numerosas personas realizaban sus compras o sólo paseaban, de pronto se vieron sorprendidos por los acordes de la ópera La Traviata, de Giuseppe Verdi, y acto seguido las voces de varios cantantes líricos del Teatro Colón que pusieron sus voces al inmortal Libiamo.

Es una versión más de esta experiencia que desconozco dónde inició, dirigida a trasladar el género operístico (sus arias) desde los grandes y selectos escenarios, a un ambiente popular como puede ser un centro comercial, un mercado, un restaurante o una terminal aérea.

Feliz idea que, de manera sorpresiva, conecta este género musical con el gran público, muchas veces renuente a tomar contacto con ésta, la expresión suprema de la amalgama de voces y música.

Primero, la gente se sorprende, luego los rostros comienzan a dibujar sonrisas de aceptación y finalmente, hasta puede verse rodar alguna lágrima de emoción, porque definitivamente, en materia musical, no hay nada más sublime que un aria de opera.

A continuación el video del centro comercial, y después algo que no es ópera sino una canzonetta (O sole mío), pero que adquiera una dimensión notable en esta versión de tres grandísimos tenores, con un acompañamiento musical incomparable (sinfónica dirigida por Zubin Metha).











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3 comentarios:

martagbp dijo...

Fue magnífico y todo fluía con mucha naturalidad. La gente no podía creer lo que estaba pasando. Hermoso!

Fer.T dijo...

el otro dia vi por youtube unos que hacian los mismo cantando el aleluya!!!! De repente se paraba una chica y empezaba a cantar y asi uno a uno hasta que llegaron como a 80 tipos cantando!!!!
Se ve que lo van haciendo por todos lados que se yo!!!

José T. dijo...

Sí, se ha hecho varias veces. A ver cuando lo veremos en DHL.