26 de febrero de 2012

La biblioteca personal (IX)


Dramas humanos con pocos personajes

¿Es más difícil para un escritor llenar las páginas de un libro con varios personajes, o con el mínimo (que pueden ser uno, dos o tres)?. Que cada uno/a de ellos/as se responda esa pregunta, que se trata sólo de simple curiosidad. La literatura ofrece material para todos los gustos.

Incluimos aquí algunos ejemplos de este tópico, apenas seis entre los tantos que se podrán encontrar. Son todos títulos que este servidor ha leído y que considera dignos de integrar esta biblioteca que estamos armando. Tres de ellos los he leído más de una vez, hecho que demuestra el interés que sus argumentos despertaron en mí, a la vez que admiración hacia sus creadores.


31. LA TREGUA (Mario Benedetti)
32. PAULA  (Isabel Allende)
33. CINCO HORAS CON MARIO (Miguel Delibes)
34. LA CARRETERA (Cormac McCarthy)
35. EL TÚNEL (Ernesto Sábato)
36. LA SOLEDAD ERA ESTO (Juan José Millás)

El uruguayo Mario Benedetti cuenta en La tregua, escrita en 1960 y situada en Montevideo, un período en la vida de un hombre viudo que se enamora de una compañera de oficina mucho más joven que él. Martín Santomé, que así se llama el personaje, relata en forma de diario, la relación cada vez más profunda que lo une con la muchacha, Laura Avellaneda. La historia tiene un final triste, después del cual el hombre retoma su vida rutinaria; lo que ha vivido con Laura fue sólo una tregua en su patética existencia.

Paula es el nombre de la hija de Isabel Allende, y es también el título del libro en el que la escritora chilena establece a través del mismo una conmovedora relación con su hija que irremisiblemente va a morir a causa de una enfermedad incurable.  Es una novela autobiográfica que Isabel Allende comienza a escribir a los pies de la cama de Paula, en la que recopila una serie de hechos y vivencias. En el libro desfilan muchos personajes, pero el eje es la relación entre madre e hija. Nada más que ellas dos.

En Cinco horas con Mario, publicada en 1966, Miguel Delibes deleita al lector con un monólogo magistral de una mujer conservadora de clase media alta, que pasa la noche junto al féretro que contiene el cadáver de su marido, un comprometido periodista e intelectual fallecido premturamente. A través de ese soliloquio sin interrupción, vamos conociendo muchos reproches hacia Mario, que ya no puede defenderse. Delibes aprovecha para recrear una lúcida pintura de la España provinciana de la época.

Cormac McCarthy ganó el premio Pulitzer por La carretera, cuyos personajes son un padre y su hijo, unos de los escasos sobrevivientes de un cataclismo (no se explica cual) que dejó a la Tierra yerma y casi sin vida. En ese escenario apocalíptico, el hombre debe atravesar territorios helados y desolados en dirección al más cálido sur y sortear diversos peligros con el propósito de poner a salvo a su hijo, metáfora sobre el futuro de la humanidad. El autor no los menciona por su nombre, como queriendo representar así a la raza humana. Un libro que estremece.

El túnel es considerado una obra esencial en la producción literaria de Ernesto Sábato, fallecido recientemente a los 99 años. Es una novela de alto contenido psicológico en un marco policíaco pero no de misterio porque sabemos desde el comienzo quién es el asesino y quién la víctima. Juan Pablo Castel es el narrador y protagonista de la historia, que busca en María la comprensión y el amor que no ha tenido. Ella es la única que ha entendido su pintura, pero lleva su obsesión al límite y la mata, creyéndose engañado.

En La soledad era esto, una mujer de 43 años se replantea su propia existencia y las relaciones que a lo largo su vida mantuvo con su madre, su marido, su hija y sus dos hermanos. Hay una versión excepcional en audio, en la que el libro es leído por la actriz Charo López, altamente recomendable. Vale la pena intentar conseguirla. Después de escucharla me interesó leer nuevamente esta novela de escritor valenciano Juan Jose Millás.
*

No hay comentarios: