17 de julio de 2014

Noé

Los temas bíblicos llevados al cine siempre me gustaron como espectáculo. Recuerdo la archi famosa Los diez Mandamientos, de Cecil B. de Mille, Rey de Reyes, y otras. Por eso, al aparecer en las carteleras la versión cinematográfica de Noé, pensé que las nuevas tecnologías del mundo digital, permitirían ofrecer unos efectos especiales deslumbrantes. Y sí, hay espectacularidad de sobra, pero también hay en esta película cosas que no termino de digerir.

Una aclaración: de ninguna manera entro en el campo de las creencias religiosas, que no pretendo cuestionar y que respeto. Me refiero sólo a la realización cinematográfica.

- Esos ridículos y deformes gigantes de piedra que tienen ojos y cerebro (hablan y dicen cosas coherentes) que ayudan a Noé a construir el arca, ¿de dónde salen? ¿Es esto lo que cuenta la Historia Sagrada sobre esta parte del Antiguo Testamento?. No lo sé, mi ignorancia es supina en la materia.

- Noé (un Russell Crowe bien alimentado) necesitaba madera para construir el arca. El Creador hace brotar como por encanto miles de árboles que los serviciales gigantes talan, cortan en listones y ensamblan (¿con qué herramientas?).

- Tal como cuenta la historia, los animales van llegando en parejas y se instalan en el arca. Para que no molesten y ni siquieran coman, los hijos de Noé preparan una especie de incienso  que van esparciendo por los distintos compartimientos hasta que los pasajeros se quedan profundamente dormidos.

- Los compartimientos con las distintas especies se ocultan con unos visillos cuyo origen ni siquiera pude imaginar.

Estas son sólo algunas escenas que me llamaron la atención.... Me gustó mucho más la separación de las aguas del Mar Rojo en los Diez Mandamientos que todo lo que se muestra aquí.

Insisto: esto es parte de la Historia Sagrada y así debe aceptarse. También es obvio que la Fe no requiere muchas explicaciones.


Tómense estos párrafos como la impresión de un espectador que vio el resultado de un grupo de trabajo. Nada más. Si alguien quiere ilustrarme sobre cualquier aspecto de lo que aquí se menciona, lo leeré con mucho gusto.
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